Ver
Mi sonido elegido ha sido el de la caída del agua desde una
cascada. El sonido lo grabé en el hundimiento de las Lagunas de Ruidera.
Realmente, una grabación no capta la esencia del verdadero sonido al chocar el
agua contra las rocas del fondo. Creo que tuve una buena elección porque para
mí representa varias cosas. La primera palabra que se viene a la mente al
escuchar el sonido es fuerza. La energía que te provoca el estruendo de
escuchar esa agua caer.
Por otro lado (aunque parezca extraño), este sonido me
transmite silencio. ¿Por qué? Porque cuando te encuentras cerca de donde se
produce, es tan fuerte que ahoga todos los demás sonidos. El único que escuchas
es el de la cascada, por lo tanto también me transmite paz porque es como si lo
demás no existiera. También da frescura. Al saber que el agua está cayendo, es
como si notaras las gotas de agua que trae el viento hasta ti.
Este sonido me provoca desconcierto porque ahoga hasta tus
pensamientos y no te ubicas en que momento del día te encuentras: si es por la
mañana, mediodía, por la
noche, atardecer,…
Por supuesto esto no se aprecia con la grabación, pero ya
que no hay otra manera de que los escuchéis a no ser que vayáis, tendréis que
conformaros con la idea que tengo yo de él. Espero que os haya gustado y
perdonar las voces de los demás turistas de fondo.
Marta Pizarroso Galán
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